El Pentágono, como se llama al Departamento de Defensa de Estados Unidos, anunció que creará un nuevo grupo para investigar informes sobre la presencia de Ovnis en el espacio aéreo restringido del país norteamericano luego de varias décadas de negar la posible existencia de naves extraterrestres en la Tierra.
La decisión se tomó luego de que el Gobierno publicara en junio un informe que abarcó a 144 observaciones de objetos voladores misteriosos sobre los que no hay datos suficientes para determinar su naturaleza u origen.
El llamado Grupo de Identificación y Sincronización de la Gestión de Objetos que Viajan por Aire será controlado por la Subsecretaría de Defensa para Inteligencia, por el Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas y miembros de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional, señaló un comunicado oficial.
La subsecretaria estadounidense de Defensa, Kathleen Hicks, declaró que la presencia de «fenómenos aéreos no identificados» en el espacio aéreo restringido supone un riesgo potencial para la seguridad del vuelo de las tripulaciones y plantea posibles problemas de seguridad nacional.
Los militares estadounidenses llevan décadas desviando, desmintiendo y desacreditando las observaciones y denuncias de objetos voladores no identificados (Ovnis) y «platillos voladores» registradas desde mediados de la década de 1940 en el país norteamericano.
El más conocido incidente con Ovnis es el caso Roswell, como se llama a la presunta caída de una nave extraterrestre en un rancho de la localidad homónima del estado de Nuevo México, el 2 de julio de 1947.
Entre 2004 y 2021, especialistas revisaron 144 incidentes inexplicables presenciados por militares en Estados Unidos y lo único que pudieron determinar fue que en la mayoría de los casos se trató de «objetos físicos», ya que fueron registrados por sensores y radares infrarrojos y electro-ópticos, además de por percepción visual.
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